Hacer conexiones. Cómo transformar nuestra comprensión y abordaje de las conductas infantiles

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Este número de Young Children ocupa un lugar especial en mi corazón. Yo experimenté la transformación de mi propia comprensión y abordaje de la conducta de mi hijo gracias a una educadora de la primera infancia. Cuando mi hijo mayor era bebé, las cosas no eran fáciles, y nosotros estábamos agotados y angustiados. Sin embargo, cuando más lo necesitamos, encontramos apoyo y consuelo en el programa de educación de la primera infancia, un programa de calidad y acreditado por la NAEYC, cuyo directora y educadoras se convirtieron en parte de nuestra familia. Mi hijo aprendía de ellos cada día, y yo también.
Maureen me enseñó cómo el gusto de mi hijo por recoger Cheerios desarrolló su motricidad fina. Gracias a las notas de Hala y Patti sobre sus proyectos artísticos y experiencias sensoriales, comprendí qué cosas despertaban su curiosidad. Y Jen, que nos mostró dónde podíamos encontrar el placer de aprender mediante todo tipo de juegos, fue además la primera persona que nos ayudó a ver que nuestro hijo podría ser un tipo de estudiante diferente. Con el tiempo, esto nos llevó a comprender que sus capacidades eran las de una persona que se encuentra en el espectro autista. La verdad es que las colaboraciones que establecimos con estas educadoras de la primera infancia no solo transformó nuestra manera de entender e interactuar con nuestro hijo, sino que cambió el rumbo de nuestras vidas.
Cómo transformar nuestra comprensión
Reflexionar sobre aquella época y contemplar los enormes desafíos que enfrentan hoy nuestros niños, familias, educadores y comunidades me hizo pensar en lo que se necesita para «transformar nuestra comprensión». ¿Con qué frecuencia somos capaces de cambiar nuestra propia perspectiva, por no mencionar la de los demás? Me he dado cuenta de que esto ocurre, sobre todo, cuando somos capaces de abordar algo con confianza, escuchar con sinceridad y buscar activamente voces y opiniones diversas. Es algo que nos exige enfrentar nuestros propios prejuicios y reconocer que puede haber un problema o un vacío en nuestra comprensión y abordajes actuales. Esto no es algo sencillo.
Y, sin embargo, lo veo prácticamente a diario en NAEYC, cuando nuestro equipo de atención al cliente resuelve con destreza un problema de un afiliado o cuando nuestro equipo de políticas recopila historias y datos de una amplia diversidad de educadores que sirven de base —y transforman— nuestro programa de políticas y nuestras prioridades. Nuestro compromiso, como organización, de centrar la atención en la diversidad de voces y conocimientos de los educadores genera una comprensión nueva y mucho más amplia. A veces nuestra escucha refuerza lo que creíamos saber y, otras veces, nos lleva en direcciones que no habíamos previsto, identifica consecuencias que no habíamos imaginado y nos sirve para encontrar soluciones en las que no habíamos pensado.
Este tipo de práctica está presente en todo este número de Young Children, que analiza las diversas maneras en que los autores escucharon a los educadores, a las familias y a los niños y utilizaron esa escucha para generar confianza, lo que, en definitiva, sirvió para que otros educadores ampliaran su comprensión de qué es lo que se esconde detrás de la conducta problemática de un niño.
Cómo traducir la comprensión en acción
Esta es la cuestión: ¿Qué hacemos con esta nueva comprensión? ¿Qué nueva visión tenemos que cambiar? Una vez más, pienso en mi propia transformación y en cómo pude adaptar mis abordajes e interacciones con mi hijo cuando logré tener una mayor comprensión. Ahora veo cómo Maureen, Patti, Hala y Jen me guiaron para pasar de la comprensión a la acción y me dieron las herramientas que necesitaba para trabajar.
Veo este mismo proceso planteado en muchos de los artículos de este número, ejemplos de cómo los educadores ampliaron su comprensión y adaptaron su trabajo para abordar las actividades con equidad y disfrute en el contexto de sus propios entornos. Por ejemplo, en uno de los artículos, vemos cómo una mayor comprensión hace que los educadores se planteen nuevas prácticas docentes que refuercen los aspectos sociales y emocionales de sus entornos.
Esto es precisamente lo que NAEYC ofrece a sus lectores y miembros: no solo información sobre «el qué», sino también numerosos ejemplos y recursos sobre «el cómo». Este es la clave de cómo usar la información, las historias y la narrativa para transformar la comprensión y luego traducir esa comprensión en acción.
Es también lo que NAEYC está llevando a cabo dentro de su propia organización. En temas que incluyen desde la acreditación de programas de educación de la primera infancia hasta la membresía, estamos reconociendo los problemas, escuchando y colaborando, para luego transformar nuestra comprensión y nuestras iniciativas de un modo que creemos que culminará en un cambio positivo y fortalecedor. Sus voces impulsan nuestro trabajo para lograr mejoras continuas dentro de nuestra asociación, pero eso no significa que el camino vaya a ser sencillo o sin escollos. Como toda transformación, el proceso es complejo y desordenado y, en definitiva, solo funciona cuando se aborda con el tipo de escucha y creación de confianza con el que estamos completamente comprometidos; y esperamos que ustedes puedan seguir o empezar a participar en este esfuerzo.
Cómo defender a los educadores en su labor de apoyo a los niños y sus familias
Gracias, en parte, al tipo de escucha y creación de confianza que experimenté con las educadoras de la primera infancia de mi hijo, el año pasado pude acompañar a mi tierno y especial hijo mayor en su comienzo de la universidad. Sigo más que agradecida con sus primeras maestras por los conocimientos, la atención y las habilidades que transformaron la comprensión y el abordaje de nuestra familia hacia nuestro hijo.
Solo diré lo siguiente: Todos los padres y madres —incluso quienes tienen una discapacidad en la familia— merecen el tipo de educación de la primera infancia cariñosa, calificada y competente que nosotros tuvimos la suerte de recibir. Es muy difícil hacer bien este trabajo, y en tanto los educadores enfrentan cada vez más desafíos y conductas problemáticas, es sumamente importante que los defendamos y los respaldemos en su labor de apoyo a cada niño y familia, tanto en sus propios programas como en su función de defensores.
Espero que los educadores que lean este número encuentren una guía que los ayude a transformar su comprensión y sus abordajes; y deseo agradecer a todos ustedes por el trabajo que hacen a diario para transformar la comprensión de los demás: sobre quiénes son ustedes, lo que hacen y lo esencial que es su trabajo para ayudar a los niños, a las familias y a toda nuestra nación a progresar.
Renovación de la membresía de NAEYC
NAEYC tiene grandes cambios para 2025. Tuvimos en cuenta sus opiniones para mejorar nuestra membresía y así ofrecer una experiencia más significativa a cada uno de nuestros miembros. Nos complace anunciar una nueva y ampliada membresía, impulsada por tecnología de punta y diseñada teniendo en cuenta sus necesidades específicas. Una membresía diseñada a partir de años de escucha y colaboración que culminan en lo que creemos que será un cambio positivo y fortalecedor. Para conocer las últimas novedades sobre esta renovación de la membresía, consulte NAEYC.org/CARES2025.
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Michelle Kang serves as NAEYC’s Chief Executive Officer.
